Seguimos con los desayunos saludables.
Yo, antes, era de margarina diaria, luego, desde que tuve información acerca de lo mala malísima que es para la salud me pasé al aceite de oliva virgen extra, y con él sigo sí, pero a veces me apetece untar el pan con algo sólido, así que buscando información, descubrí esta maravilla vegetal, con aceite de coco virgen extra, que, aún sin dejar de ser una grasa, para consumo ocasional que, por supuesto, hay que controlar y no pasarse, es menos mala nutricionalmente hablando y está riquísima. Ya sé lo demonizado que está el aceite de coco, pero hay que buscar información veraz, apoyada en estudios serios, que los hay y muy buenos, y el resultado es que no es tan malo como lo pintan. Como todo, con moderación.