Volvemos como cada Carnaval a las recetas típicas. Es cierto que se hacen una vez al año pero yo, al menos, hago cantidades industriales y al final me pasa como con los polvorones, que las orejas ya me salen por las idem jaja.
Este año nueva receta. Me decía una amiga que si a ella le sale bien algún postre, hace ya para siempre el mismo. Yo no opino igual, me gusta probar cosas nuevas variando los ingredientes, el modo de preparación, etc. y a veces descubres cosas interesantes. Esta receta está inspirada en una del blog La Cocina de Frabisa y el resultado es estupendo, me gusta mucho la textura de la masa.
Los ingredientes no difieren mucho de otras recetas de orejas que ya están en este blog desde hace tiempo y que también salen muy ricas, pero bueno, yo ofrezco otra alternativa y cada cual que escoja lo que prefiera.
Vamos al lío.
Ingredientes:
-
625 gr de harina
-
2
huevos
-
100
gr de manteca de vaca
-
100
ml de agua templada
-
130
gr de azúcar
-
½ vasito
de anís o una botellita de esencia de anís (12 ml)
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ralladura
de una naranja
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pizca
de sal
-
Azúcar
y canela para espolvorear al final.
Preparación:
Derretir la manteca de vaca en el agua templada
y mezclar con el huevo y el azúcar.
Añadir el anís y la sal y mezclar todo
bien.
Incorporar la harina a cucharadas.
Amasar bien hasta que la masa no se pegue
a las manos.
Hacer una bola con ella y dejarla reposar
media hora.
Dividir la masa en pequeñas porciones y estirar cada una de ellas hasta que quede bien fina.
Freir cada oreja en aceite de girasol muy
caliente pero sin que llegue a humear. Yo las frío de dos en dos.
Darles forma de oreja con un tenedor.
Darles la vuelta cuando estén doradas y
vigilar que no se quemen.
Sacarlas del aceite y ponerlas sobre una
fuente con papel absorbente.
Cuando se hayan atemperado, espolvorear con el azúcar mezclado con la
canela en la proporción de cuatro cucharadas de azúcar por una de canela.
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