Ahora que han pasado las fiestas queremos sobre todo deshacernos de aquellos dulces y turrones que han quedado y ponernos rápidamente a dieta para recuperar la línea.
Bien, pues si os ha quedado alguna tableta de turrón blando ésta es la ocasión de aprovecharlo haciendo una tarta tan rica y fácil como la que hoy os presento.
Es muy suave y no resulta nada empalagosa. Y si no queréis tomarla ahora porque ya habéis empezado "la vida en serio", podéis congelarla y degustarla después de un tiempo, ya veréis como para entonces os apetece más, o sacarla un día que tengáis una visita inesperada o cualquier otra celebración.
La receta es de Manzana&Canela y apenas la varié. Tampoco saqué muchas fotos porque esta receta es tan fácil que cuando me quise acordar ya tenía la mezcla hecha.
Vamos con la receta.
Vamos con la receta.
Ingredientes:
Para
la base:
100 gr de galletas tipo
maría
75 gr de mantequilla
Para
el relleno:
200 ml de leche
1 tableta de turrón (250
gr.)
200 ml de nata para montar
1 cucharada de miel
1 cucharada de azúcar
6 hojas de gelatina neutra
Para adornar
Nata montada
Almendra crocanti
Preparación:
Lo
primero es triturar las galletas y mezclarlas con la mantequilla derretida. Forrar
con ellas un molde, procurando que quede todo por igual y reservar en la
nevera.
Poner
a hidratar la gelatina en un poco de agua fría durante 5 minutos.
Poner
un cazo al fuego con la leche, la miel y el turrón partido en trocitos.
Revolver bien, a fuego medio, hasta que se disuelva la mezcla y quede homogénea.
Retirar
del fuego y añadir la gelatina hidratada y escurrida. Revolver con varillas
hasta que se disuelva del todo. Dejar enfriar un poco.
Montar
la nata con la cucharada de azúcar hasta que esté firme.
Añadirla
poco a poco a la mezcla del turrón, a mano, con movimientos envolventes.
Pasarla
al molde y meter en la nevera mínimo cuatro horas o toda la noche para que
cuaje.
Adornar
con rosas de nata montada y almendra crocanti.
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