jueves, 30 de julio de 2015

Tarta de Santiago

El día de Santiago, mi amiga Charo nos obsequió en la playa con una degustación de la tarta de Santiago que había preparado ella ese día. Estaba tan rica y jugosa que le pedimos, -cómo no-, la receta y nos la dió. Decidí prepararla al día siguiente y ahí tenéis el resultado.

Es tan fácil, se hace tan rápido y sale tan rica que yo ya la he convertido en la tarta estrella para un momento de prisa porque se prepara en un pis pas.

La cruz la podéis imprimir desde internet, hay un montón de entradas en Google. Yo, como en La Guardia no tengo buena conexión a la red tampoco tengo impresora, así que me la tuve que dibujar y luego recortar, primero en papel y luego la pasé a cartón porque es más pesado a la hora de espolvorear el azúcar glass y no se mueve, y para mayor comodidad al retirarla le puse una solapita que ayuda bastante.

A modo de curiosidad, si queréis conocer un poco más sobre esta tarta podéis consultar el BOE de 22 de marzo de 2.006 (pág. 11254 y siguiente), donde constan todas las características y normas que regulan este producto con Denominación de Origen e Indicación Geográfica Protegida, así como un poco de su historia. Muy interesante.







Ingredientes:

-          4 huevos
-          200 gr de azúcar
-          250 gr de almendra molida
-          ralladura de limón

Preparación:

Poner en un bol los huevos con el azúcar y batirlos sólo para mezclarlos.



Añadir la almendra y la ralladura de limón y mezclar todo.




Echar la preparación en un molde. Yo prefiero para esta tarta el de silicona de 26 cm.
Hornear a 180º unos 25 ó 30 minutos



Dejar enfriar un poco y desmoldar. Colocarlo sobre rejilla para que acabe de enfriarse.

Llevar la tarta al plato o bandeja  donde se servirá.

Colocar la cruz de cartón encima y espolvorear toda la superficie con azúcar glass.






Retirar la cruz con cuidado y listo para disfrutar.










jueves, 16 de julio de 2015

Tarta de queso y arándanos

¿Sabíais que los arándanos con unos grandes aliados de las mujeres? Entre sus múltiples propiedades, están muy aconsejados para prevenir las incómodas cistitis así como las molestias gastrointestinales.
Tienen poder antioxidante y ayudan a fortalecer el colágeno, que tanta falta nos hace. También ayudan a potenciar algo tan importante como el rendimiento del cerebro y la concentración. Un puñadito por la mañana y otro por la noche nos serán de clarísima eficacia. 

Aprovechando que en esta época del verano se consiguen con más facilidad los arándanos frescos, os presento esta riquísima tarta, según la receta extraída del libro "Caprichos al horno" de Caroline Bretherton y que, servida bien fría, es una delicia.







Ingredientes:

50 gr de mantequilla
125 de galletas tipo Digestive
150 gr de arándanos azules
150 gr de azúcar y 3 cucharadas adicionales
400 gr de queso philadelphia
250 gr de queso mascarpone
2 huevos grandes y una yema más
1 cucharadita de esencia de vainilla
2 cucharadas de harina tamizada

Para la salsa:

100 gr de arándanos azules
1 cucharada de azúcar
1 chorrito de zumo de limón

Preparación:

Precalentar el horno a 180º.

Triturar las galletas y mezclarlas con la mantequilla derretida. Forrar la base de un molde desmontable de 20 cm. (El mío era desmontable pero en forma de corazón porque era un día especial)






Poner en la batidora  los 150 gr de arándanos con 3 cucharadas de azúcar y batir a fondo.




Colar la mezcla y ponerla en un cazo a fuego lento de 3 a 5 minutos, hasta que espese. Reservar.

Meter en la batidora el resto del azúcar, los quesos y los ingredientes restantes. Mezclar bien.

Verter la masa sobre la base de galleta y alisar la superficie con una espátula.

Repartir la mezcla de arándanos sobre la masa y, con una brocheta, hacer remolinos para que forme un dibujo.




Forrar los lados exteriores del molde con papel de aluminio. Meter el molde en otro recipiente mayor, con agua que alcance hasta la mitad del molde y meter al horno al baño María.





Hornear 40 minutos  hasta que la masa esté firme pero algo blanda. Apagar el horno y dejar la puerta abierta.

Transcurridos unos minutos retirar el aro del molde. Con ayuda de pos palas o dos espátulas pasar el pastel al plato donde se va a servir y dejar enfriar bien.

Entre tanto, poner en un cacito a fuego lento todos los ingredientes de la salsa. Remover de vez en cuando hasta que se disuelva el azúcar. Pasar a una jarra de servir y meter en la nevera.







En el momento de servir, poner un trozo de tarta regado con un chorrito de la salsa de arándanos.








martes, 7 de julio de 2015

Galletas de almendra

Much@s me habréis oído decir repetidas veces que la receta culpable de mi afición a la repostería es la de las galletas de almendra de Pili que hoy os presento.

Ya se que ésta debía haber sido la primerísima receta publicada en este blog, por la importancia que tuvo para mí, pero, a pesar de haberlas hecho muchas veces, no las había fotografiado nunca y así fue pasando el tiempo hasta hoy que quiero dar su merecido homenaje a las que para mí son LAS GALLETAS DE PILI.

Ella me pasó la receta y las hice, por primera vez, hace dos veranos, convencida de que, como casi siempre, no me saldrían bien porque era un desastre haciendo dulces, ah.... pero sí que salieron, y estaban buenísimas, y yo no me lo podía creer ...!

Ese fue el primer eslabón de una cadena que ha continuado hasta hoy. He ido aprendiendo y experimentando día a día y no se hasta donde o hasta cuando llegará mi afición y dedicación a ésto, lo que sí puedo deciros es que hoy por hoy lo disfruto muchísimo y que, en mi caso, ha podido más el interés que la experiencia.

En consecuencia, si una inexperta como yo ha podido sacar adelante cualquiera de las recetas que ves aquí, tú también puedes.







Ingredientes:

- 150 gr de almendra molida
- 150 gr de azúcar
- 1 tarrina de mantequilla
- 2 medidas de la tarrina, de harina
- azúcar glass para el acabado.

Preparación:

- Mezclar la almendra con el azúcar.


- Añadir la harina y mezclar de nuevo.
- Por último incorporar la mantequilla con los dedos hasta integrarla totalmente.



- Hacer una bola y dejarla reposar tapada en la nevera una hora.


- Extender la masa y cortar las galletas con un cortapastas. O hacerlas en la palma de la mano.






- Colocarlas en la bandeja del horno cubierta con papel de hornear.



- Meter al horno precalentado a 200º unos 10 ó 12 minutos. No deben quedar muy tostadas sino blanquecinas como las de la primera foto (yo en las últimas me pasé un poco). 

Mientras tanto ya se puede preparar otra bandeja con la hornada siguiente.

- Sacarlas y dejarlas entibiar


- Rebozarlas en azúcar glass




(Guardarlas en un recipiente hermético unos 3 ó 4 días antes de consumirlas, están más ricas)



lunes, 6 de julio de 2015

Bizcocho con frutas y chocolate

Después de este lapsus de tiempo vuelvo a la carga con algunas recetas que tengo preparadas. 

Ahora en verano tengo más dificultad para actualizar el blog, los culpables son el buen tiempo, la playita, las vacaciones ...  y también hay una parte técnica y es que sólo dispongo de  conexión a internet de forma esporádica al cambiar de domicilio. Pero ello no implica que no siga buscando y practicando cosas nuevas que subiré en cuanto me sea posible. No prometo regularidad pero sí continuidad así que no dejéis de consultar el blog.

Bueno, ahora vamos con la receta de hoy. Tenía algunos restos de fruta que amenazaban estropearse si no se consumían; era poca fruta para una macedonia y no tenía muchas ganas de la mezcla típica con crema o yogur, al estilo de las que ya he publicado, así que me inventé un bizcocho con frutas y pensé que no le vendría mal una cobertura de chocolate, ya sabéis cuánto me gusta. 

Y así ha quedado. Super super jugoso.







Ingredientes:

¼ kg de fruta (yo puse peras, ciruelas y fresas)
4 huevos
8 cucharadas de azúcar
8 cucharadas de harina
1 yogur griego natural
3 cucharadas de aceite de girasol
Ralladura de 1 limón
1 sobre de Royal

Para la cobertura:

200 ml de nata para montar
50 gr de mantequilla
100 gr de chocolate Nestlé Postres

Preparación:

Pelamos la fruta, la cortamos en trozos pequeños y reservamos.



Separamos las claras de las yemas. Mezclamos éstas con el azúcar  y batimos hasta que resulte una mezcla cremosa. Reservamos las claras.

Añadimos a la mezcla de yemas y azúcar el yogur, el aceite y la ralladura de limón, mezclamos bien. Por último, añadimos la fruta y mezclamos a mano con una cuchara.





Tamizamos la harina con la levadura y las añadimos a la mezcla anterior.




Montamos las claras a punto de nieve fuerte y las vamos incorporando poco a poco, manualmente, al resto.







Echamos la preparación en un molde engrasado y enharinado y lo metemos al horno precalentado a 170º durante unos 50 minutos o hasta que al meter un palillo éste salga casi seco (digo casi porque éste es un bizcocho muy jugoso y el palillo nunca va a salir seco del todo).
Como los tiempos dependen de cada horno, si veis que el bizcocho está dorado por fuera pero aún no se ha hecho por dentro, cubridlo con papel de aluminio y seguid la cocción unos diez o quince minutos más.

Una vez terminado, desmoldar en cuanto temple un poco y dejar enfriar sobre rejilla, con mucho cuidado, porque como es un bizcocho blando tiende a romperse con facilidad.

Una vez frío, lo metéis en la nevera mientras preparáis la cobertura.








Poned en un cacito al fuego  la nata y la mantequilla. Cuando empiece a hervir, retirad del fuego y añadid el chocolate troceado, que con el calor se derretirá enseguida.

Colocad el bizcocho sobre una rejilla y ésta sobre otro recipiente mayor para recoger el sobrante y verted el chocolate sobre el bizcocho sin miedo, que él solito buscará camino y cubrirá toda la superficie. Yo le hice un dibujito a cuadros con el filo de un cuchillo.

Una vez frío, metedlo en la nevera para que el chocolate endurezca del todo.