El domingo pasado, en La Guardia, hubo un concurso de rosquillas dentro del evento "A Guarda Doce" y, cuando leí la publicidad, me entró el gusanillo de hacer unas rosquillas, no para concursar sino porque hacía muchísimo tiempo que no dedicaba un poco de atención a ese dulce tan socorrido y que en todas las casas vienen haciéndolo madres y abuelas desde siempre.
Quería que fueran un poco diferentes. Siempre asocio las rosquillas con el anís, lo cual está muy bien y a mí me encantan, pero esta vez quería cambiar así que, buscando un poco por aquí y otro poco por allá, me decidí por las de leche condensada y, poniendo de un lado y quitando de otro, finalmente nació esta receta.
Ingredientes:
- 1 lata de leche condensada mediana (390 gr.)
- 4 huevos
- la ralladura de un limón
- 500 gr. de harina floja
- 1 sobre de Royal
- 5 cucharadas de azúcar
- canela en polvo
- aceite de girasol
Preparación:
Batir la leche condensada con los huevos y la ralladura del limón unos 8 minutos o hasta que se forme una crema homogénea.
Añadir la harina tamizada con la levadura, a cucharadas, una a una. No añadir la siguiente hasta que no haya integrado bien la anterior.
Amasar hasta que la masa no se pegue a los dedos (yo empecé con el robot y luego pasé a la encimera). Si vemos que necesita más harina añadiremos una poca pero sin pasarnos, ya sabéis que las harinas no son todas iguales pero no conviene añadirle mucha más. Engrasar las manos con un poquito de aceite para trabajar mejor la masa. Dejarla reposar media hora.
Hacer bolas con la masa y darles forma de rosquilla. Yo, en vez de unirlas por los extremos prefiero hacer un agujero en el centro, con los dedos índice y pulgar, y moldearlas.
Freirlas en abundante aceite, bien caliente, poniendo pocas en la sartén. No os despistéis porque enseguida cogen color (por eso no tengo fotos de la fritura, requirió toda mi atención jaja).
Escurrirlas en papel absorbente, que tendréis preparado en una fuente al lado de la sartén para pasarlas allí de inmediato y que no queden grasientas.
Dejar enfriar un poco y entonces rebozarlas con una mezcla de azúcar y canela.
Que pintaza las rosquillas me encantan, las haré y las pondré en mi blog si me das tu permiso.
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ResponderEliminarSin ningún problema Paqui. Espero que te gusten.
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